Para Ojo y el British Council, uno no es suficiente, así que con un poquito de ayuda hicimos un segundo Flash mob, Nos encontramos en la Castellana y ya con los relojes coordinados comenzamos a dispersarnos, mientras unos se sentaron en en las mesas de El León -local elegido por la producción para hacer esta promoción - otros caminaban por los alrededores, a la espera del pitazo; sí del pitazo como en un juego de fútbol. Al oirlo, todos se levantaron de sus sillas y al ritmo de los audífonos de "Incubator"comenzaron a bailar. Las demás personas que se encontraban en el local no entendían que ocurría, así que dejaron sus conversaciones para vernos bailar o sumarse en el tumulto. Al pasar los 4 minutos estipulados, todos los implicados se sentaron o siguieron caminando, como si nada.
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